POR MARIO MALPARTIDA MENDOZA
El maltrato infantil es intrínseco a la aparición de la civilización, tan antiguo como la humanidad. Su abordaje como problema grave se inicia con el síndrome del niño golpeado, descrito por primera vez en 1868 por Ambrosie Tardieu, luego de realizar autopsias de 32 niños golpeados y quemados. Posteriormente, en 1946, Caffey describió la presencia de hematomas subdurales asociados con alteraciones radiológicas de los huesos largos en los niños, creándose la expresión del síndrome del niño golpeado, por Henry Kempe y Silverman, en 1962.
Este problema se registra, por lo general, en los espacios de la convivencia familiar, en donde los padres, son quienes ejercen alguna forma de violencia física como medida de disciplina que incluye insultos y desprecios, haciendo que los niños se sientan impotentes y desanimados para enfrentar estas experiencias. En el Perú existen señales de la existencia de este fenómeno en lo reportado por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, a través del Programa Nacional contra la Violencia Familiar y Sexual.
La Encuesta Nacional sobre Relaciones Sociales (ENARES 2015), revela que un porcentaje de los padres de familia está de acuerdo con que a veces es necesario gritar a los niños y adolescentes para que entiendan lo que se les dice. Otro porcentaje indica que se debe castigar físicamente al niño o adolescente si se mete en problemas, miente con frecuencia o coge algo que no le pertenece.
La Región de Huancavelica no es ajena a este fenómeno. Según estudios de Huamán, se encontró que los padres agreden a los niños de diferentes formas como por ejemplo jalones de orejas, jalones de cabellos, empujones, pellizcos, correazos, patadas entre otras formas de agresión.
De lo expuesto, el maltrato infantil y, específicamente, el maltrato físico, se constituye en un factor de riesgo que afecta la salud mental y afectiva de la víctima; fenómeno que se constituye en una barrera que impide el desarrollo psico-social evolutivo normal de los niños. En este contexto los investigadores Huamán Albites, Margarita Isabel, Nieva Villegas Lilia María, Gómez Gonzales Walter Edgar tuvieron como objetivo, determinar la relación entre el maltrato físico y la inteligencia emocional en niños y niñas de la Institución Educativa N° 36005 del Distrito de Ascensión, en Huancavelica. Teniendo como hipótesis: existe relación entre el maltrato físico y la inteligencia emocional en niños y niñas de la mencionada Institución Educativa.
El trabajo de investigación es tipo observacional, el estudio se desarrolló en la Institución Educativa Nº 36 005, de nivel primario, perteneciente al Ministerio de Educación, ubicada en el distrito de Ascensión, dentro de la jurisdicción de la Dirección Regional de Educación y la UGEL Huancavelica, Perú. Esta institución alberga niños y niñas entre 6 y 12 años de edad. La investigación se realizó en el año 2019.
La población estuvo constituida por 83 niñas del 5°y 6° grado de estudios. Fue seleccionada mediante un método no probabilístico e intencional y estuvo constituida por niñas entre 10 y 13 años, víctimas de maltrato físico, haciendo un total de 48.
Para la identificación de las víctimas de maltrato físico se empleó la técnica de la entrevista y su instrumento: la guía de entrevista estructurada. Para la variable inteligencia emocional se empleó la técnica psicométrica como instrumento la escala de Likert, Evaluación Emocional BarOn ICE: NA – versión completa. Posteriormente, se aplicó el instrumento para medir el maltrato físico en un ambiente separado, cuidando la privacidad de cada alumno y, posteriormente, se realizó el tamizaje a fin de identificar solo a las víctimas de maltrato.
En cuanto a los resultados, de los 83 estudiantes encuestados, el tipo de maltrato físico que se presentó “a veces” fue, principalmente. jalón de orejas, los golpes con correa, los golpes con la mano o cachetadas, las patadas y golpes con chicote, los pellizcos, los empujones y golpes con palo y los golpes con soga.
Finalmente, la inteligencia emocional encontrada fue en general alta en grupo de niños que no sufrieron ningún tipo de maltrato físico, de la misma forma se evidencio en los que experimentaron algún nivel de maltrato, concluyendo que no hay relación entre los niveles de maltrato físico y los niveles de inteligencia emocional.
Mayor información sobre este artículo de investigación en el siguiente enlace.
http://revistas.udh.edu.pe/index.php/RPCS/article/view/227e/58