RECUPERAN POR PRIMERA VEZ EL ARN DE UN TIGRE DE TASMANIA: UNA VENTANA AL PASADO DE UNA ESPECIE EXTINTA

POR:
por Carlos Meléndez

En un hito científico sin precedentes, un equipo de investigadores ha logrado recuperar el ARN de un tigre de Tasmania, una especie que se extinguió hace más de 80 años. Este avance promete ofrecer nuevas perspectivas sobre la biología y la evolución de esta enigmática criatura, así como sobre la extinción en sí misma.

El tigre de Tasmania, también conocido como lobo marsupial o tilacino (Thylacinus cynocephalus), desapareció en la década de 1930. Aunque había sido una especie dominante en el ecosistema australiano, factores como la caza indiscriminada y la destrucción de su hábitat lo llevaron a la extinción. El último ejemplar conocido murió en el Zoológico de Hobart en 1936.

El equipo de científicos, dirigido por el investigador Emilio Mármol Sánchez (autor principal del estudio), biólogo computacional en el Centro de Paleogenética y SciLifeLab en Suecia, utilizó técnicas avanzadas de secuenciación para analizar muestras preservadas de tejido de tilacino. Aunque se había recuperado previamente el ADN de especies extintas, como el mamut y el neandertal, la obtención de ARN, que es más lábil y de menor duración que el ADN, se consideraba una tarea casi imposible.

La recuperación del ARN del tigre de Tasmania puede ofrecer información valiosa sobre las enfermedades, la dieta, el metabolismo y otros aspectos biológicos del animal que el ADN solo no puede revelar. Además, puede proporcionar pistas sobre cómo proteger y tal vez, en el futuro, intentar resucitar a especies en peligro de extinción o ya extintas.

Más allá de simplemente identificar el ARN, la investigación logró mejorar nuestras comprensiones de las anotaciones genéticas, tanto codificantes como no codificantes. Sorprendentemente, el estudio identificó una isoforma de microARN única del tigre de Tasmania, un detalle que solo el ARN podía confirmar. Además, se detectaron rastros de virus de ARN, abriendo una nueva puerta para perfilar la evolución viral en especies extintas.

Lo que estos resultados destacan es el tremendo potencial que tiene la secuenciación del ARN en el campo de la paleontología y la genómica. Las vastas colecciones de museos de historia natural y los restos en permafrost pueden albergar secretos genéticos que anteriormente considerábamos perdidos.

Los descubrimientos en el tigre de Tasmania ilustran que no solo podemos aprender más sobre las especies extintas, sino que también podemos tener una comprensión más profunda de la evolución de la vida en nuestro planeta. Este estudio representa un salto cuántico en nuestra capacidad para entender el pasado y, con suerte, brindará herramientas y conocimientos valiosos para preservar y comprender el futuro.

valiosos para preservar y comprender el futuro.

Para mayor información revise el artículo de investigación a través del siguiente enlace:

https://genome.cshlp.org/content/early/2023/09/08/gr.277663.123

Loading

Compartir:
Facebook
Twitter
LinkedIn
Scroll al inicio