SALUD MENTAL DE LOS SERVIDORES DE LA SALUD EN TIEMPOS DE PANDEMIA

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La salud mental es fundamental en la estabilidad y el bienestar del ser humano.  Se trata de un estado de bienestar que permite a un individuo desarrollar sus actitudes y capacidades, hacer frente al estrés, laborar de manera productiva y generar contribución para el desarrollo de su comunidad. Por otra parte, la salud mental es la combinación de factores emocionales, psicológicos y sociales, que son esenciales para el bienestar de un individuo.  Los servidores de la salud han sido la primera línea de defensa contra la COVID-19, por lo que resultaron los más afectados por diversas variables que no solo merman su salud debido al agotamiento por la jornada laboral y el riesgo al contagio.  Por otra parte, otros estudios afirman que las elevadas jornadas laborales y la reducida experiencia respecto al manejo de una pandemia se asocia a un mayor riesgo de sufrir depresión y trastorno de estrés postraumático. Mientras que otros estudios enfatizan que la preocupación por la exposición al contagio de sus amigos y familiares, así como el aislamiento social e interpersonal, provocan que exista una ruptura de las redes de apoyo social y familiar.

Estudios   realizados   sobre   el   impacto   de   la   pandemia en el sector sanitario enfatizaron el estado de vulnerabilidad en que se encuentra los servidores de la salud, especialmente los que se encuentran en primera línea debido al alto riesgo de infección, el aumento del estrés laboral y el miedo a contagiar a sus familias. Una investigación determinó que los bajos niveles de apoyo familiar presentaron un mayor riesgo para padecer problemas de salud mental.  Ante lo cual, la presente investigación realizado por Walter Patricio Castelo, Jair Alexander Zamora, Franklin Gerardo Naranjo, Anthony Rafael Loor, Lady Rey Torres y Nelson Geovany Carrión, buscó determinar la influencia de los estados emocionales negativos en la salud mental de los servidores de la salud en tiempos de pandemia.

El estudio utilizó un enfoque cuantitativo de alcance descriptivo y diseño transversal, y se aplicó durante el mes de mayo y junio al personal de la salud de Santo Domingo (Ecuador). En vista de que no existe un dato definido sobre la cantidad de servidores de la Salud que laboran en Santo Domingo de los Colorados, no fue posible determinar la población de estudio. Sin embargo, para la determinación de la muestra de estudio se tomó el criterio de Kline, quien manifestó que una investigación cuantitativa debe tener como mínimo 10 participantes por cada variable observable. 

En vista de que el cuestionario utilizado tiene 21 preguntas, la muestra de estudio fue de 229 servidores de la salud.  El tipo de muestreo fue no probabilístico y se aplicó la técnica bola de nieve. El cuestionario estuvo conformado por 21 preguntas. Los resultados obtenidos permitieron identificar que los servidores de la salud que atendieron en primera línea en tiempos de pandemia y cuyas edades comprendían entre 21 a 30 años presentaron estrés moderado, mientras que, en los comprendidos entre edades de 31 a 60 años, los niveles de estrés fueron severos.  Esto permite conocer que las personas menores a 30 años no se vieron tan afectados ante las situaciones estresantes que se vivieron en aquellos tiempos, mientras que a los mayores de 30 sí les afectó. Respecto a la depresión, se pudo conocer que tuvo un nivel moderado para los servidores de la salud entre 21 y 30 años, mientras que para quienes tienen entre 31 y 40 años esta fue severa, y para los comprendidos entre 41 y 60 años fue Textremadamente severa.  

Este hallazgo permite determinar que mientras más edad tienen los participantes del estudio, el nivel de depresión sigue aumentando. Finalmente, se puede notar que la ansiedad fue extremadamente severa para todos los servidores de la salud que atendieron en primera línea a pacientes con COVID-19 en tiempos de pandemia. A su vez, se puede evidenciar que mientras mayor edad tienen los encuestados, el nivel de ansiedad sigue aumentando. Los resultados obtenidos    con relación a la actividad laboral que desempeñaron los encuestados en tiempos de pandemia, permiten evidenciar que los médicos, enfermeros, técnicos de emergencia y auxiliares de enfermería, presentaban severos niveles de estrés, mientras que para el personal administrativo este fue moderado.  Este hallazgo permite notar que el personal que más contacto cercano tuvo con pacientes con COVID-19 fue el mayormente afectado en sus estados   emocionales, debido a la presencia de severos niveles de estrés.

Respecto a los hallazgos, con base a la edad se pudo identificar que, mientras mayor es el rango de edad de los encuestados, el nivel de estrés se va incrementando, a tal punto que las personas comprendidas entre 31 y 60 años presentaron severos índices de estrés. Este descubrimiento permite respaldar la postura de las investigaciones que determinaron que los niveles de depresión de los servidores de la salud se incrementan dependiendo de su edad.  Estos hallazgos coinciden con la determinación de que los profesionales de la salud sufrieron afecciones en su psiquis debido a la repentina y complicada situación que se vivió al momento de atender a los infectado.

Para mayor información de este artículo de investigación ingresar en el siguiente enlace.

http://revistas.udh.edu.pe/index.php/RPCS/article/view/502/703

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