El colágeno es una proteína que sustituye un tercio de la proteína del cuerpo humano. Esta proteína la encontramos en los huesos, los músculos, los tendones, las córneas, los vasos sanguíneos, inclusive en los dientes.
El colágeno sirve como una especie de pegamento y actúa como un elemento de sostén que permite mantener unido el conjunto del cuerpo.
Es por esta razón que el colágeno es considerado como una solución al envejecimiento, por lo que tiene gran demanda. Los expertos del marketing aprovechan esta necesidad del consumidor utilizando diversas estrategias para promover a los sustitutos del colágeno hasta convertirlo en el producto preferido en el mercado por los consumidores. El resultado es que se gasten millones en su consumo.
Sin embargo, algunos investigadores, entre ellos, la dermatóloga Sonya Kenkare, afirma que no hay pruebas concluyentes de que los sustitutos del colágeno tengan los beneficios publicitados para poder recomendar a sus pacientes.
En la actualidad, este suplemento no tiene ninguna norma, no existe ninguna regulación, tampoco se obliga a las empresas que comercializan este producto a demostrar su eficacia o pureza.
Algunos expertos recomiendan que se consuman alimentos que contienen colágeno, como la carne, el pollo, los huevos entre otros, de esta forma el cuerpo pueda construir su propio colágeno.
Fuente: https://tinyurl.com/5dda2c2a