El pasado 12 de septiembre, Jaime Maussan, ufólogo de reconocida trayectoria, realizó explosivas declaraciones en el Congreso Mexicano, afirmando tener en su posesión seres no humanos. El anuncio ha desencadenado una ola de especulaciones y debates tanto en la comunidad científica como en el público general.
Un reporte del Instituto de Física de la Universidad Autónoma de México cuestiona la veracidad de las afirmaciones de Maussan. El documento, que ya ha sido revisado por múltiples expertos, sostiene que no hay evidencia suficiente para validar las afirmaciones del ufólogo y que las pruebas presentadas carecen de rigor científico. El Instituto se deslinda de cualquier tipo de interpretación y afirma que el estudio que realizaron solo determina la antigüedad.
Recordemos que en el año 2021 el diario «El Comercio» de Perú publicó un artículo sobre las ‘Momias alienígenas de Nasca’, donde se divulgaron los resultados de un estudio del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses del Ministerio Público del Perú, en ella se afirmó que se trataba de un fraude. El estudio concluye que muchos de los supuestos «seres extraterrestres» presentados en otros casos han resultado ser fraudes o malentendidos, a menudo relacionados con animales terrestres o fenómenos naturales.
A pesar del escepticismo de la comunidad científica, las declaraciones de Maussan han capturado la imaginación del público. Las redes sociales están inundadas de teorías y discusiones, y han surgido múltiples peticiones en línea solicitando que se realice una investigación más exhaustiva.
Es preciso señalar que Jaime Maussan ha sido una figura polémica en el ámbito de la ufología por décadas. Sus críticos lo acusan de sensacionalismo y falta de rigor, mientras que sus seguidores lo ven como un pionero en la búsqueda de la verdad sobre fenómenos inexplicables.
El caso, lleno de incertidumbres y controversia, sigue abierto. Aunque las afirmaciones de Maussan no han sido verificadas, han generado un renovado interés en la vida extraterrestre y los fenómenos inexplicables, poniendo de manifiesto la eterna tensión entre la ciencia y la curiosidad humana.
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